El sector de las canteras es muy exigente tanto para los trabajadores como para las máquinas.
La dispersión de los equipos, la escasez de personal, las duras condiciones de funcionamiento y la presión de los costes suponen un reto constante para los operarios y empleados de las canteras. La lubricación automática con sistemas de lubricación permanente puede aumentar enormemente la seguridad y disponibilidad de los equipos.